La empresa Taym, contratista en la obra de remediación, envía cada día a los medios de comunicación locales, puntualmente y sin omisiones, un “aviso de actividades diarias” (monitoreos ambientales, rezan los comunicados). Pero, mientras tanto, fueron desmantelando los obradores y abandonando la Localidad.

Los comunicados no son enviados por el Jefe de Obra -que ya no está en San Antonio Oeste-, ni por el Gerente de Operaciones -que también se ha ido-, sino por una persona llamada Marcos Flores, cuyo cargo o función en la empresa o en la obra se desconoce.

Las múltiples acciones desarrolladas, tanto por la Comisión Multisectorial y la comunidad en su conjunto, como por el Ministerio Público Fiscal, el Superior Tribunal de Justicia de la Provincia, el Gobierno provincial, la Legislatura de la Provincia, Legisladores Nacionales por Río Negro, el Concejo Deliberante y el Intendente Municipal, no parecen estar consiguiendo la respuesta adecuada del organismo responsable de la obra, la Secretaría de Minería de la Nación.

El 17 de abril la Jueza Federal Mirta Filipuzzi resolvió hacer lugar a la medida cautelar peticionada por miembros de la Multisectorial y ordenó al Estado Nacional -Ministerio de Energía y Minería de la Nación, Secretaría de Minería de la Nación- que “arbitre en forma urgente las medidas necesarias para remediar los sitios identificados como calles y veredas de las Manzanas 383 y 384 de San Antonio Oeste”. La orden no ha sido respondida aún, pero la empresa, a juzgar por lo que puede observarse, se está yendo.

La pila del Autódromo y la pila 2 de La Estanciera no han sido intervenidas en ningún sentido; las escorias contaminantes siguen presentes igual que antes de la llegada de Taym, pero ya no cuentan con cerco que restrinja el acceso de las personas; quien se acerque estará expuesto a severos riesgos de intoxicación. Las pilas intervenidas por Taym (pilas 1 y 3 de La Estanciera) tampoco están cercadas, a pesar de la contaminación subyacente, que no ha sido saneada. La pila de La Fundición, también intervenida por Taym, presenta un estado lamentable, con el cerco destruido y escombros en su interior. Las calles y veredas de la Fundición, en particular las calles Libertad, Automóvil Club Argentino y Alvarado, presentan concentraciones de metales pesados muy por encima de los valores de referencia establecidos por ley para suelo residencial. Así nos deja Taym. Y así nos dejará Geamin si no acata la orden judicial.